Anónimo dijo...
Varios de los que aqui escriben conocen perfectamente el ambiente del mundillo intelectual de Puno. Secretos, intimidades, bajezas. Se dicen lo que no pueden hacerlo como hombres. Garambel es efectivamente un plagero, pero otro Ensayo igualito es de José Luis Ayala y muchos otros son así, pero nadie se atreve a denunciar con nombre propio. Pero lo más sorprendente es que ninguno de esos intelectuales de postín sale a decir algo: un poquito de verdad, una pizca de aclare, una rayita de dignidad y memoria. ¿No hay un Malraux andino por allí? Si Benda habló de la traición de los intelectuales, en esta república del silencio que es el Perú habría que hablar de la deserción de los intelectuales. Ningún patricio de las letras dice nada! Porque saben que esas denuncias son ciertas y no porque el blog sea anónimo, excusa para leerlo, sonrojarse y preparar su "venganza". La próxima víctima de la masacre tipo la organizada por Fidel Mendoza y cía. será el "sospechoso" de autoría de este Blog. Así nomás es Puno. Quien quiere pelearse con Garambel y José Luis Ayala? Nadie. Por eso reparten los emails venenosos de Gloria Mendoza con placer íntimo. Esa es la vida: elogiar el plagio como arte navajero y demostrar que el cinismo es el ismo de buena parte de la tribu intelectual peruana.
¡Viva la chaira lumpen de los intelectuales puneños!
Ruth Hurtado, poeta paiteña
Hace 1 mes